Capacidad importadora del Estado creció 78,1% en el segundo trimestre

Johana Villalobos

La capacidad importadora del Estado se fortalece a pesar de que atrás quedaron los días en que Venezuela batía récord en sus compras desde el exterior. Las importaciones de bienes por parte del sector público crecieron durante el segundo trimestre del año en un 78,1% afianzando la tendencia de aceleración creciente experimentada desde el 2006.

El tráfico de mercancías que entró al país en este período estuvo marcando por el desempeño del Estado que pasó de comprar unos 2.172 millones de dólares en el segundo trimestre de 2009 a unos 3.869 millones de dólares a la misma fecha de 2010.

El sector privado, por su parte, continúa perdiendo participación en el total de las compras externas del país, dado que registró una contracción de 22,8% entre abril y junio de este año.

Sin embargo, es el sector privado quien realiza más actividades de importación y, por lo tanto, quien tiene mayor necesidad de divisas. Al respecto, economistas señalan que "el sector privado sigue siendo el de mayor peso dentro de la estructura del Producto Interno Bruto (PIB) y el mercado laboral. De hecho, ocho de cada 10 empleos formales se generan en el sector privado y dos tercios de la inversión proviene de este sector".

La entrada de bienes de origen internacional al país totalizó el segundo trimestre en
9. 953 millones de dólares, de los cuales unos $ 3.869 millones corresponden al sector público y unos $ 6.084 millones a la actividad privada. Con ello, el semestre concluyó en unos 17.368 millones de dólares de importación.

Así es que el ala privada concentra, al cierre del primer semestre del año, un 64% de participación, mientras que el sector público se ubica en un 36%; lo que pone al Estado a competir con los privados en esta área.

Según el Banco Central de Venezuela (BCV), las compras privadas –que entraron desde el 2009 en un proceso de decrecimiento- “disminuyeron principalmente en maquinarias y equipos, alimentos, bebidas y aparatos eléctricos”.

Mientras que en las públicas los mayores incrementos se observaron en maquinarias; sustancias y productos químicos; equipos de transporte; metales comunes y maquinarias y aparatos eléctricos, “destinadas a la ejecución de obras de generación hidroeléctrica y termoeléctrica, por parte de la industria petrolera y de las empresas del sector eléctrico”.