Emisión de Bono Soberano Amortizable 2022: ¿Buena opción?

Johana Villalobos

Una vez más, el Gobierno venezolano se lanza en una emisión de deuda denominada en dólares - que en el pasado represetó la tentación para que las casas de bolsas cayeran en los excesos ya por todos conocidos-, para responder a la demanda y necesidad de tenencia de dólares por parte de los importadores e inversionistas en el país.

A todas luces, los analistas hablan de la buena oportunidad de esta emisión, aún sin conocer el precio de la misma que será anunciado por el ministerio de Planificación y Finanzas a partir de las 9 am de mañana.

Una de las razones que exhaltan los expertos es el cupón de la emisión que fue fijado en un 12,75%, cuando lo tradicional es que para períodos entre el 2022 y 2024 el interés de los cupones de bonos oscile entre un 6% y un 9%. Claro, la otra lectura de ello, es que el país posee una apreciación de riesgo muy alto en los mercados internacionales.

Pero sin lugar a dudas, las expectativas están centradas en el precio único del instrumento. Sí este llega a ser alto, la tesis oficialista de especulación en el mercado de valores carecerá de "moral".

Las estimaciones de analistas comienzan a apuntar un precio entre 110% y 118% con un cambio implícto similar al que resulta de las transacciones del Sitme, 5,30 bolívares por dólar.

Lo cierto de todo ello, es que esta nueva emisión de bonos constituye una forma alternativa y lícita de adquirir divisas luego que el Ejecutivo eliminará al mercado permuta; proceso en que se vieron disminuidas las casas de bolsas y sociedades de corretaje.

Aunado a eso, una nueva emisión de bonos por 3.000 millones de dólares supone más endeudamiento para el país, al tiempo de que con esto se está apoyando el nivel de oferta del esquema cambiario alternativo tutelado por el Banco Central de Venezuela; dado que hasta el momento la mayoría de los dólares transados en el Sitme provienen de manos de los bancos privados.